Dependencia del petróleo: beneficios a corto plazo e inviabilidad a largo plazo

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2006
Jaffar Mohammed
Bahrain Economic Society

Por ser un país que obtiene la mayor parte de sus ingresos del petróleo, Bahrein se ha beneficiado del reciente aumento de los precios mundiales del crudo, que ha estimulado el crecimiento en todos los sectores de la economía. Sin embargo, las reservas petroleras de esta pequeña nación isleña podrían agotarse en un decenio, lo cual significa que se deben buscar otras fuentes de ingreso para prevenir el colapso económico y seguir atendiendo las necesidades de la población.

Bahrein es una isla muy pequeña dentro de un archipiélago de 33 islas. Tiene una superficie total aproximada de 703,63 kilómetros cuadrados. Sin embargo, esta cifra cambia continuamente debido a extensos y frecuentes proyectos de recuperación de tierras. En 1986, Bahrein quedó conectado con Arabia Saudita mediante una carretera elevada de 25 kilómetros. La mayor parte de la isla es plana; en promedio, la altitud no excede los 60 metros por encima del nivel del mar. En la costa norte de la isla, que tiene menos de cinco kilómetros de ancho, hay cultivos, mientras que el resto del país es un desierto, con una superficie de piedra caliza dura. El clima es húmedo y extremadamente caluroso en verano, mientras que las temperaturas del invierno se sitúan por debajo de los 20ºC. Las precipitaciones fluviales son escasas.

La población total del país, estimada en 70.000 habitantes en 1863, creció rápidamente como consecuencia del desarrollo económico y la mejora de las condiciones de vida. Para 1965, la población había aumentado a 182.203. En los 26 años siguientes se duplicó con creces hasta un total de 508.037 en 1991, y en 2004 llegó a 707.160. Gran parte del crecimiento de la población puede atribuirse al aumento de la cantidad de extranjeros que viven y trabajan en el país, como se muestra en la Tabla 1.

Tabla 1. Población por nacionalidad

Año

Nacionalidad

Total

 

Bahreiníes

No bahreiníes

 

1941

74.040

15.930

89.970

1950

91.179

18.471

109.650

1959

118.734

24.401

143.135

1965

143.814

38.389

182.203

1971

178.193

37.885

216.078

1981

238.420

112.378

350.798

1991

323.305

184.732

508.037

2001

398.221

239.361

637.582

2004

438.209

268.951

707.160

Fuente: Organización Central de Estadísticas y Ministerio de Hacienda.

Pese al compromiso del gobierno de incrementar la cantidad de ciudadanos bahreiníes empleados en el sector privado, los trabajadores extranjeros, principalmente de Asia meridional y sudoriental, todavía ocupaban 65% de los empleos en el sector en 2004, debido a las diferencias de salario con los ciudadanos nacionales. Las mujeres representan 18% de la fuerza de trabajo bahreiní. En 2004, la fuerza total de trabajo se calculaba en 284.969 trabajadores, de los cuales 99.767 eran bahreiníes nativos (Ministerio de Trabajo).

Una economía alimentada por el petróleo

Los hidrocarburos siguen siendo el único recurso natural de Bahrein. La economía doméstica todavía depende en gran parte de la producción y exportación de petróleo para mantener su propia existencia y satisfacer las necesidades básicas de la población. Sin embargo, desde 1970, el sector del petróleo ha decrecido a un promedio anual de 6%, y según previsiones, las reservas se agotarán en nueve años. Las reservas probadas de petróleo de Bahrein son relativamente pequeñas y la cantidad de pozos productivos es limitada. Dado que el rendimiento de los pozos restantes es bajo, cualquier intento por aumentar la producción implicaría mayores costos. Por lo tanto, a menos que se desarrollen otros sectores para reemplazar al sector del petróleo, la economía podría derrumbarse.

Bahrein también cuenta con reservas relativamente sustanciales de gas natural. Sobre la base del actual ritmo de extracción, se prevé que las reservas de gas duren al menos 25 años. Las reservas totales se estimaban en 255.000 millones de metros cúbicos en 1979 y se redujeron a 201.000 millones en los últimos años. El país depende de dos fuentes para su producción de gas: gas asociado (encontrado en asociación con petróleo crudo) y gas seco (encontrado en yacimientos de gas natural). A medida que aumentaba la necesidad de energía junto con el rápido desarrollo industrial, Bahrein trató a la vez de utilizar el gas asociado y reducir la cantidad de gas quemado como “desperdicio” en los pozos petrolíferos.

Ante la reducción del rendimiento de los yacimientos petrolíferos en tierra, Bahrein se ha vuelto cada vez más dependiente del petróleo producido en el yacimiento off-shore de Abu Saafa, que comparte con Arabia Saudita. El yacimiento de Abu Saafa genera actualmente la mayor parte de la producción de petróleo de Bahrein, como muestra la Tabla 2.

Tabla 2. Producción de petróleo crudo (en miles de barriles) en el período 1981-2004

Año

Producción de petróleo crudo

Producción total

 

Yacimientos en tierra de Bahrein

Producción de Abu Saafa

 

1981

16.862

19.502

36.364

1983

15.273

19.206

34.479

1985

15.301

23.819

39.120

1987

15.216

22.491

37.707

1989

15.583

25.136

40.721

1991

15.373

26.351

41.724

1993

14.875

38.385

53.260

1995

14.459

38.585

53.044

1997

14.159

45.194

45.208

1999

13.677

61.746

77.422

2001

13.656

71.723

87.380

2004

13.647

62.690

76.338

Fuente: Ministerio de Petróleo e Industria, Bahrain Oil and Gas Statistics.

Hacia la diversificación

En las últimas décadas, el Gobierno realizó esfuerzos concertados para transformar la economía, dependiente del sector primario para la producción y el empleo, en una economía industrial moderna y un centro de servicios. La estrategia económica del gobierno está actualmente en revisión, y la liberalización de la inversión interna ha pasado a considerarse un asunto esencial. Los principales objetivos del gobierno son:

En muchos países, los ingresos gubernamentales se derivan en su mayor parte de diferentes impuestos. En Bahrein, como en otros países del Golfo, los ingresos gubernamentales proceden principalmente del petróleo. Sin embargo, a medida que los ingresos del petróleo disminuyen gradualmente junto con la producción, aumenta la posibilidad de que los impuestos cobren mayor importancia en el futuro. De hecho, ya se ha registrado una marcada tendencia al aumento de los impuestos indirectos.

El presupuesto gubernamental consta de dos tipos de transferencias de ingresos (rentas petroleras y no petroleras) y de gastos corrientes y de capital. Los ingresos del petróleo se obtienen de dos fuentes, los yacimientos petrolíferos en tierra y el yacimiento offshore de Abu Saafa, compartido con Arabia Saudita. Los ingresos no relacionados con el petróleo incluyen donaciones, impuestos indirectos y rendimientos de inversiones. Mientras, los gastos gubernamentales constan principalmente de compras de bienes y servicios para satisfacer las necesidades administrativas, militares y de servicios sociales del país. El Gobierno asigna los ingresos del petróleo a la construcción y el desarrollo de todos los sectores no petroleros, como el transporte, la manufactura, la agricultura, los servicios públicos, el comercio y otros.

En general, el gasto público es determinado por los ingresos gubernamentales. Por lo tanto, un aumento en los ingresos del petróleo normalmente se traduce en un mayor gasto público, lo que conduce a una mejora general de las condiciones de crecimiento económico. Es importante destacar que, como los ingresos no petroleros son proporcionalmente menores, el gasto corriente se ha financiado hasta ahora principalmente a partir de los ingresos del petróleo. Bahrein se ha beneficiado del actual aumento en los precios mundiales del petróleo, que ha afectado directa y positivamente todos los sectores económicos del país, alentando el crecimiento y generando más oportunidades laborales, tanto en el sector público como en el privado. No obstante, sin importar cuán altos sean los precios del petróleo, a medida que disminuyan las reservas, los ingresos del petróleo disminuirán proporcionalmente.

Sería difícil reducir el gasto actual, que consiste principalmente en salarios y gastos de mantenimiento (62% del gasto total), sin causar una profunda perturbación a la sociedad en su conjunto. El problema con este gasto es que, una vez que ha alcanzado cierto nivel o que mantiene determinado ritmo de crecimiento, no solo se vuelve fundamental para el nivel de vida, sino que su crecimiento influye en el de otros sectores. Dada la dificultad para la reducción del crecimiento o del volumen de este gasto, se prevé que permanezca alto.

El gasto de capital es de dos tipos: activos de capital fijo y transferencia de capital, de los cuales la electricidad y el agua constituyen la mayor parte. Este gasto se financia en parte con ingresos del petróleo y donaciones (principalmente de Arabia Saudita y Kuwait) y en parte con créditos internos. Cualquier reducción del gasto de capital reflejaría una política gubernamental de contención fiscal, como forma de enfrentar la reducción de los ingresos del petróleo.

Las donaciones y los créditos son elementos importantes del presupuesto estatal. Además de proveer ayuda financiera, otros países del Golfo han participado en la implementación de proyectos sociales y de desarrollo en Bahrein. Kuwait, por ejemplo, ha financiado 18 escuelas primarias, secundarias y técnicas en la isla. Arabia Saudita y Emiratos Árabes Unidos han contribuido con servicios sociales, y ambos prometieron financiar parcialmente el programa de destilación de Bahrein. Sin embargo, las donaciones están determinadas por las condiciones económicas y políticas de la región. La inestabilidad política del Golfo desde 1980 sugiere que la ayuda financiera a Bahrein disminuirá. Desde 1980, los países del Golfo han estado más preocupados por los acontecimientos políticos de la región, y en casi todos ellos el gasto militar ha aumentado rápidamente.

El nivel del gasto gubernamental, más que el nivel de los precios o de los ingresos del petróleo, determina el monto del superávit o del déficit del presupuesto estatal. Por ejemplo, en 1977 y 1983, cuando el gasto experimentó un crecimiento explosivo, el presupuesto estatal tuvo un déficit de BHD 14,7 millones y BHD 46,9 millones respectivamente (USD 40,12 millones y USD 128 millones). Ante un déficit fiscal, el Gobierno suele optar por el camino fácil de dejar intactos algunos rubros poco importantes y recortar el gasto de capital mediante la postergación de algunos proyectos de inversión.

Mejora del nivel de vida

Bahrein ha adoptado un plan de acción para mejorar el nivel de vida del ciudadano promedio. El plan incluye mejoras en la atención de la salud (en particular medicina preventiva), programas de educación y capacitación, una expansión de la infraestructura actual y más proyectos de vivienda. Bahrein ya es uno de los países árabes con mejor posición en la lista del Índice de Desarrollo Humano elaborada por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Con un índice de 0,846 en 2005, apenas fue superado por Qatar y Emiratos Árabes Unidos, ambos con 0,849. Además, Bahrein ocupó el primer lugar en el Informe Árabe sobre Desarrollo Humano del PNUD.

Bahrein se ha fijado un objetivo de crecimiento anual del producto bruto interno (PBI) de 5% a 6% en los próximos cuatro años, lo que representa un incremento significativo a partir de la tasa de crecimiento anual promedio de 4,5% en los cuatro años anteriores. Para este objetivo, es fundamental atraer entre BHD 650 millones y BHD 700 millones (USD 1.770 millones y USD 1.910 millones) por año.